sábado, 10 de enero de 2015

VICTIMAS REPUBLICANAS DE GENALGUACIL Y BENARRABÁ EN EL VALLE DE LOS CAÍDOS


Muro de la Memoria en el
Cementerio
     El pasado día 20 de Diciembre se hizo un homenaje en Benarrabá a las víctimas del franquismo, entre ellas hay cuatro de Genalguacil. Se realizo un Pleno Extraordinario de reconocimiento a los asesinados  y posteriormente en el cementerio se descubrió un Muro de la Memoria.
Documento de la Fundación del Valle
de los Caídos.
    
     En los años que llevo de investigación nunca había tenido noticias,  ni visto un documento que hiciese referencia a que víctimas de Genalguacil estuviesen enterradas en el Valle de los Caídos. Una compañera que investiga la Memoria Histórica en Benarrabá, Antonia Barroso, me dijo que le habían facilitado un documento, el cual os expongo, donde estaban los asesinados en Benarrabá y el traslado posterior de sus restos al Valle de los Caídos. Nueve estaban enterrados  en una fosa común en el cementerio de Benarrabá donde fueron ejecutados el 3 de Noviembre de 1936 y el décimo Juan Rodríguez López, de Genalguacil, fue asesinado el 10 de Febrero de 1937 en el camino de Genalguacil a Benarrabá en el lugar denominado Arroyo Turrillo.
Pleno en el Ayuntamiento

           En Marzo de 1959 la fosa común del cementerio de Benarrabá fue abierta y sus restos junto con los de Juan Rodríguez fueron introducidos en una furgoneta y llevados al Valle de Los Caídos.


      Juan Rodríguez López, fue sacado de la fosa que a él mismo le hicieron cavar sus ejecutores en Arroyo Turrillo, donde fue asesinado. Conocedora su hermana Patrocinio que lo iban a desenterrar, confeccionó un saquito donde depositar y transportar sus restos, cuentan que el día de la exhumación, estaba presente el que lo había asesinado, para indicar el lugar exacto de la ejecución; estando desenterrando los restos, Patrocinio cogió un hueso de su hermano y con él golpeo a su ejecutor en la cara. Posteriormente llorando y portando ella misma los restos de su hermano en el saquito, los llevó al cementerio de Benarrabá y los introdujo en la furgoneta con los nueve restantes que los transporto al Valle de los Caídos.

     Las víctimas que se encuentran en el Valle de los Caídos son:

1. Luis Collado Barranco, de Benarrabá. Casado con Francisca del Río Velázquez natural de Genalguacil y padre de la también víctima Juan Collado del Río.
2. Juan Collado del Río, de Genalguacil. Ejecutado con 28 años, hijo del anterior Luis Collado Barranco de Benarrabá y Francisca del Río Velázquez de Genalguacil.
3. Pedro Barranco Perea, de Benarrabá. Ejecutado con 38 años.
4. Bartolomé Perea Ocaña, de Benarrabá. Ejecutado con 27 años.
5. Andrés Mena Luque, de Benarrabá. Ejecutado con 40 años.        
6. José Collado Avilés, de Benarrabá. Ejecutado con 36 años.
7. José Navas Ayala “Nicanor”, de Genalguacil. Ejecutado con 45 años. Su hermano Luis Navas Ayala también fue ejecutado en Genalguacil.
8. Sebastián Ortega Moreno, de Benarrabá. Ejecutado con 27 años.
Concejal Socialista de
Genalguacil
9. Pablo Carrillo Cózar, de Genalguacil. Ejecutado con 24 años. Fue traído de la cárcel de Ronda a solicitud de un jefe franquista de Genalguacil, para asesinarlo en Benarrabá. Nació el 25 de Enero de 1913 hijo de Francisco Carrillo de Cózar y Concepción Cózar Ruiz. Ejecutado y enterrado en la fosa común del cementerio de Benarrabá el 3 Noviembre de 1936. Apoderado del Frente Popular en las elecciones de 1936, Concejal socialista en el Ayuntamiento de Genalguacil con el Frente Popular y militante de U.G.T. Lo consideraban según documento del Archivo Militar de Málaga: “Significado extremista muy peligroso, fue fusilado por las fuerzas nacionales en unión de otros marxistas en el pueblo de Benarrabá”.
10.   Juan Rodríguez López, de Genalguacil. Ejecutado con 29 años el 16 de Febrero 1937. Secretario del Partido Comunista de Genalguacil. Nació el 4 de Septiembre de 1907 hijo de José Rodríguez Urda y María López de Cózar, casado con Resalía Barroso Godoy. La historia oral cuenta que fue denunciado por un falangista de Genalguacil que le había vendido un caballo. Juan le había pagado la mitad, faltándole pagar la otra parte, el denunciante recupero el animal y se quedo con el dinero que le había dado Juan a cuenta. Lo ejecutaron después de hacerle cavar su propia fosa  en Arroyo Turrillo (Benarrabá).